Ernesto Muñoz
José Balmes Parramón (1927-2016) llegó a Chile en calidad de migrante junto a sus padres españoles a bordo de un barco, el Winnipeg, contratado por el Gobierno de Chile para traer a suelo nacional a personas que se vieron obligadas a marchar a Francia, después de la derrota del Frente Popular en España en 1939. El poeta Pablo Neruda, en su calidad de cónsul, fue el encargado de organizar el viaje de dos mil refugiados españoles.
Posteriormente, después de los años de permanencia en el país, pudo optar a la nacionalidad chilena, en 1947.
“Nunca jamás, ni siquiera al final de mi vida, voy a hacer lo suficiente por agradecer el hecho de estar en este país y de ser ciudadano chileno, gracias justamente a Pablo Neruda. Como alguien dijo alguna vez, las deudas de amor no se terminan de pagar nunca, y esta es una gran deuda que yo tengo con él todavía”, dijo.
Nacido en Montesquiu, un pequeño pueblo de Cataluña, en 1927, su padre Damià Balmes llegó a ser el alcalde de la localidad, como militante de le ERC, Izquierda Republicana de Cataluña, lo que después de la derrota de la Republica lo obligó a huir a Francia junto con su familia.
En Chile, José Balmes estudió en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile, donde después fue contratado como docente, llegando a ser su director.
Dedicó su vida a la docencia en diferentes universidades. En 1972 fue nombrado Decano de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Chile, cargo al que debió renunciar después del golpe de Estado de 1973. Abandona Chile y viaja a Francia, donde vive hasta 1986. En ese país ejerció como profesor en la Universidad de París I Panthéon-Sorbonne.
Regresa al país y da clases de Pintura en las universidades Católica y Finis Terrae.
Se casó con Gracia Barrios, Premio Nacional de Artes Plásticas, de quien tuvo una hija, Concepción, también pintora.
La labor docente de Balmes se plasmó en numerosas generaciones de artistas chilenos, tales como Eugenio Téllez y Eugenio Dittborn, Eliana Simonetti, Catalina Mena, Carolina Oltra, entre otros.
En 1947 participó en la fundación del Grupo de Estudiantes Plástico GEP, junto a artistas de su promoción.
Posteriormente organizó e integró el Grupo Signo, nombre acuñado por el crítico José María Moreno Galván; la única exposición del grupo se realizó en España, junto a Gracia Barrios, Alberto Pérez y Eduardo Martínez Bonati.
El Museo de la Solidaridad fue una iniciativa de intelectuales de izquierda que visitaron Chile en el gobierno de Allende, destinado a reunir obras de arte de artistas de todo el mundo para solidarizarse con el pueblo de Chile. Posteriormente Mario Pedrosa, crítico brasileño, impulsaría este acuerdo, y José Balmes conformaría junto a Miguel Rojas Mix, la Comisión Nacional para recibir las obras que vinieron del resto del mundo conformando un legado único, cuyo único propietario es el pueblo de Chile.
Balmes en el Arte en Chile
A Balmes se le debe considerar como el representante más idóneo del Movimiento Informalista en Chile.
Balmes, según comenta, inició su actividad artística a muy corta edad, en Montesquiu, tomando contacto con los denominados impresionistas tardíos, como Santiago Rusiñol. Cuando tenía 10 años concurría al cine de su pueblo a dibujar a oscuras los modelos que usaban las actrices de cine que servían de figurines a su madre, que era modista.
En Chile, en la Escuela de Bellas Artes fue alumno de Pablo Burchard, pintor de carácter academicista, donde adquirió la técnica pictórica de los figurativistas. Realizó su primera exposición en 1950, junto al poeta chileno Enrique Lihn.
Su obra la pudo exhibir en diferentes museos y galerías, tanto en Chile como en otros países.
Balmes obtuvo premios en salones oficiales y Primer Premio, Mención Dibujo, Bienal Americana de Arte de Cali, Colombia (1971); Primer Premio de Grabado, Exposición Internacional Intergraphic de Berlín, Alemania (1977); Premio de la Crítica, Santiago (1984); Primer Premio Bienal Iberoamericana de Arte sobre Papel en Buenos Aires, Argentina (1986); fue nombrado Profesor Emérito de la Facultad de Arquitectura y Bellas Artes de la Universidad Católica de Chile (1993); Profesor Emérito de la Universidad de Chile (1996); Orden al Mérito Docente y Cultural «Gabriela Mistral», otorgado por el Gobierno de Chile (1997); Premio Michoacán, Mención Pintura, otorgado por la Comisión Nacional de Cultura del Partido Comunista de Chile (1997).